lunes, julio 27, 2009

Homenaje a Catulo de Verona / L. A. De Villena

De Luis Antonio de Villena
Un billar es una sala mágica
donde tapetes verdes y focos silenciosos
se mezclan a máquinas que foguean
fortunas con canicas de acero
y muchachas reidoras. Donde se dispara,
tras cristal, a liebres saltarinas
e inmensos osos que rugen. Un lugar
donde, frecuente, para, tentadora,
la Belleza. Como tú, que jugabas
a esto o aquello, con indolencia
adolescente, demorando tu pelo negro
y tu mirada negra, jovencísima,
y tus piernas esbeltas, fastuosas.
Pura tentación de la Belleza, no es
dificil imaginar tu cuerpo delicioso,
suave, sobre la colcha. Ofrecido,
a una perfecta desnudez cómplice
y callada. Así, delicada Belleza,
como pasas ahora entre los billares,
buscando el mejor postor o la entrega,
tras el juego feliz y la bebida, generosa
***
¿Qué extaño don es la belleza? ¿Lo
sabe quien la tiene? ¿De dónde procede,
cómo surge, por qué es tan oscuro su
nacer, por qué tan diversos sus poseedores?
¿En que consiste su hechizo? ¿Y cómo
puede surgir en el denso olor de unos billares?
De Hymnica (1979)
Influenciado por los clásicos griegos y latinos, a De Villena le gustan los lados "menos habituales" de la vida, según me dice, como los seres nocturnos o la referencia a personajes de calle o individuos extravagantes, muchos de ellos homosexuales. Sus lecturas recuerdan a un Constantino Cavafis más occidental y más contemporáneo. "Detrás de un poeta hay muchos. Esos poetas que dicen que nadie les ha influenciado, o que se molestan mucho porque les pueden relacionar con uno o con otro, están equivocados. La literatura es una cadena y es muy importante que seas consciente de los eslabones que hay detrás". Por el lado más clásico, advierte como grandes influencias a Catulo o Calímaco. Incluso es dado a entremezclar su voces con los argots urbanos de los siglos XX y XXI. Como a lo largo de su producción, sobre todo desde la aparición de Hymnica, recurre a los temas homoeróticos. Este aspecto de su producción le otorgó reconocimiento, al grado que Hymnica es considerado un clásico de la poesía gay de la España actual. / La foto fue tomada de su página personal.
Luis Antonio de Villena (Madrid, España, 1951)