martes, marzo 28, 2006
lunes, marzo 27, 2006
Vomitan gusanos por las cuencas... / Trish
se arrastran por pasadizos incompletos,
por veredas mutiladas
trazan sendas.
Aturdidos, se retuercen con la luz,
se zurran en los quicios de las puertas,
se rajan los brazos con navajas desdentadas,
arrojan margaritas a los cerdos,
sus ojos ven con vaguedad
como si nada existiera.
Abiertas las babosas bocas
lamen barandales
puertas y ventanas.
Ensangrientan las flores y las mean.
¡Míralos, Señor, qué bellos son!
Mis hijos,
¡Mis hermosos sentimientos!
martes, marzo 21, 2006
Amor a primera vista / W. Szymborska
de que los ha unido un sentimiento repentino.
Es hermosa esa seguridad,
pero la inseguridad es más hermosa.
Imaginan que como antes no se conocían
no había sucedido nada entre ellos.
Pero ¿qué decir de las calles, las escaleras, los pasillos
en los que hace tiempo podrían haberse cruzado?
Me gustaría preguntarles
si no recuerdan
-quizá un encuentro frente a frente
alguna vez en una puerta giratoria,
o algún "lo siento"
o el sonido de "se ha equivocado" en el teléfono-,
pero conozco su respuesta.
No recuerdan.
Se sorprenderían
de saber que ya hace mucho tiempo
que la casualidad juega con ellos,
una casualidad no del todo preparada
para convertirse en su destino,
que los acercaba y alejaba,
que se interponía en su camino
y que conteniendo la risa
se apartaba a un lado.
Hubo signos, señales,
pero qué hacer si no eran comprensibles.
¿No habrá revoloteado
una hoja de un hombro a otro
hace tres años
o incluso el último martes?
Hubo algo perdido y encontrado.
Quién sabe si alguna pelota
en los matorrales de la infancia.
Hubo picaportes y timbres
en los que un tacto
se sobrepuso a otro tacto.
Maletas, una junto a otra, en una consigna.
Quizá una cierta noche el mismo sueño
desaparecido inmediatamente después de despertar.
Todo principio
no es más que una continuación,
y el libro de los acontecimientos
se encuentra siempre abierto a la mitad.
miércoles, marzo 15, 2006
El cielo es / Z. Vázquez
y no es un viñedo,
donde el vino es
y no es vino
Esto inquieta a varias personas porque:
1) El hombre habita el universo en su exilio sin patria original y sin tierra prometida.
B) Nuestro peso rompe una burbuja de jabón, si es que deseamos viajar en su interior.
todo se habría desplomado ya hace tiempo.
También me han hecho sonreír algunas aves
o voces cantando de hambre.
Los poetas continúan fallando.
viernes, marzo 10, 2006
Poema en forma de pájaro / J. E. Eielson
...................azul
............brillante
.............el Ojo el
pico anaranjado
............el cuello
............el cuello
............el cuello
............el cuello
............el cuello
............el cuello
............el cuello
............el cuello herido
............pájaro de papel y tinta que no vuela
............que no se mueve que no canta que no respira
............animal hecho de versos amarillos
............de silencioso plumaje impreso
............tal vez un soplo desbarata
............la misteriosa palabra que sujeta
............sus dos patas
........................patas
........................patas
........................patas
........................patas
........................patas
........................patas
........................patas
........................patas a mi mesa
*
Le llega una invitación, vía mail, al Pájaro detenido, para sumarse al homenaje que este blog (el cual resulta ser otro blog-pájaro) le hace al poeta peruano Jorge Eduardo Eielson, quien recién dejó este mundo (el 8 de este mes) para entrar a lo sigue, a lo que siga, a lo que sea. - Aquí un link sobre el autor.
Jorge Eduardo Eielson (Lima, Perú, 1924 - Milán, Italia, 2006)
miércoles, marzo 08, 2006
El cementerio / R. Desnos
Recojo sus primeras hojas primaverales
entre un zócalo de granito y una columna de mármol.
Recojo sus primeras hojas primaverales,
pero otras hojas nacerán de la feliz podredumbre
de este cuerpo que, si puede, vivirá cien mil años.
Pero otras hojas nacerán de la feliz podredumbre,
pero otras hojas se ennegrecerán
bajo la pluma de los que cuentan sus aventuras.
Pero otras hojas se ennegrecerán
con una tinta más líquida que la sangre y que el agua de las fuentes:
testamentos incumplidos, palabras que se pierden más allá de los montes.
Con una tinta más líquida que la sangre y que el agua de las fuentes,
¿Podré yo defender mi memoria del olvido
como una jibia que huye perdiendo la sangre, perdiendo el aliento?
¿Podré yo defender mi memoria del olvido?
viernes, marzo 03, 2006
Casa Lajas / J. Cos Causse
con las miradas húmedas de ternura
penetran amorosamente en esta casa
comienzan a conspirar contra el tiempo
a encontrar ventanas
a justificar el amor
hasta que salga volando algún pájaro
............... del cuarto